Nichiren Shonin, cuyo nombre de infancia era Yakuōmaro, siempre fue aficionado al estudio desde su niñez. A los 12 años, ascendió al templo Keisei-ji, cerca de su lugar de origen. Este templo pertenecía a la escuela Tendai, y bajo la enseñanza de Dōzenbō, el monje residente, comenzó a estudiar seriamente y pronto decidió ordenarse. En esta escena, se muestra cómo, al ser visitado por su madre, le pide que lo olvide y se dedique a su vida monástica, rechazando las visitas futuras.