Kōzō Bosatsu, quien fue nombrado así debido a que su sabiduría, mérito y compasión son ilimitados como el vacío, se apareció en un sueño ante Renshō. Le otorgó una joya de sabiduría, y a partir de ese momento, se dice que su visión se agudizó, permitiéndole esclarecer las enseñanzas ocultas de las diversas sectas budistas y los sutras, así como comprender la situación política y social. Sin embargo, los estudios en Keisei-ji ya no satisfacían a Renshō.