Yo no construyo salones budistas o pagodas, Yo no pído limosnas. Lo único que considero precioso es mi vida, y esta se la he ofrecido al Sutra del loto.
Los budas de las tres existencias del pasado, del presente y del futuro, cuando aún eran mortales comunes, ofrecieron su vida al Sutra del loto y así pudieron convertirse en budas.
Por esta razón, los nombres de todos los diversos Budas tienen el prefijo de la palabra namu.1
Namu es una palabra del idioma de la India, y en este país significa "dedicar la vida". Al explicar el término "dedicar la vida", T'ien-t'ai dice que significa "dedicar la vida con determinación". Al ofrecer sus vidas al Sutra del loto, se convirtieron en budas.
Y ahora yo, Nichiren, ofreciendo mi vida al Sutra del loto...
Fondo
Faltan la primera y la última parte de esta carta, y se desconoce su fecha y destinatario. Nichiren Daishonin habla de cómo ha dedicado su vida al Sutra del loto y analiza el significado del término namu o nam, que deriva de la palabra sánscrita namas. Se tradujo al chino como "dedicar la vida". El Daishonin señala que todos los budas alcanzaron la iluminación al Sutra del loto al dedicar sus vidas, y dice que él está comprometido a hacer lo mismo.
Nota
1. Una referencia a las frases "Namu-Shakyamuni-butsu", "Namu-Amida-butsu" y similares. "Namu-Amida-butsu" significa "Homenaje al Buda Amida" o "Me refugio en el Buda Amida".