He recibido su obsequio de un saco de arroz, donado para el servicio en memoria de Ueno, en el aniversario de su muerte. Lo ofrendaré en presencia del Buda y recitaré la parte en verso del capítulo «Duración de la vida» del Sutra del loto.
En cuanto al significado de la devoción filial, la conducta correcta de un hijo sólo puede entenderse sabiendo en qué consiste el proceder opuesto. Como ejemplo de acto contrario al deber filial, una persona llamada Yu-meng1 golpeó cierta vez a su padre y, a raíz de esa acción, cayó fulminado por un rayo. Otra persona llamada Pan-fu,2 que maldijo a su madre, fue atacada y devorada por una serpiente venenosa. El rey Ajatashatru asesinó a su padre y, como resultado, enfermó de lepra blanca. Y el rey Virudhaka, por haber matado a uno de sus progenitores, quedó atrapado en el río dentro de un barco en llamas, y cayó vivo en el infierno del sufrimiento incesante. Ninguno de estos hechos ocurrió por haber dado muerte a alguien ajeno al parentesco. Considerar los resultados de la conducta incorrecta nos permite comprender cuán inmenso ha de ser el beneficio del buen proceder filial.
Las escrituras no budistas,3 que suman más de tres mil volúmenes, no se refieren a ningún otro asunto; no enseñan otra cosa que la devoción filial a los padres. Sin embargo, aunque estas enseñanzas le permitan a uno retribuir los beneficios recibidos de sus padres en esta existencia, no le servirán para ayudarlos en la próxima. La deuda de gratitud que uno contrae con su padre y su madre es vasta como el océano. Si uno se ocupa de ellos mientras viven, pero no hace nada para ayudarlos en su próxima existencia, su retribución será tan ínfima como una gota de agua.
Asimismo, los más de cinco mil volúmenes de las escrituras budistas no se ocupan de otro tema; sencillamente establecen los méritos de la piedad filial. Sin embargo, aunque los primeros cuarenta y tantos años de enseñanzas de El Que Así Llega se refieran, en apariencia, al amor filial, en dichas doctrinas no se revela la verdadera enseñanza sobre esa cuestión. Por lo tanto, aunque parezcan pertenecer al grupo de las enseñanzas sobre la conducta filial, en realidad no se cuentan entre ellas.
El honorable Maudgalyayana rescató a su madre del sufrimiento que padecía en el estado de las entidades hambrientas.4 Sin embargo, sólo pudo conducirla a los estados de los seres humanos y celestiales; lo que no pudo es guiarla al Camino que lleva al logro de la Budeidad. A sus treinta años, El Que Así Llega Shakyamuni expuso una enseñanza a su padre, el rey Shuddhodana, que le permitió p.1080alcanzar el cuarto y más elevado nivel de iluminación.5 Y a los treinta y ocho años, guió a su madre, la dama Maya, hasta el nivel de arhat.6 Sin embargo, aunque tales actos parezcan expresiones de amor filial, lo cierto es que el Buda faltó a sus deberes como hijo, pues si bien liberó a sus padres de los seis senderos, los guió a un camino que jamás les habría permitido lograr la Budeidad.7 Es como imponer a un príncipe heredero la condición de plebeyo, o como casar a una princesa con un hombre de baja estirpe.
Por esta razón, el Buda dijo: «[Si utilizara un vehículo inferior para convertir aunque más no fuese a una sola persona], sería culpable de avaricia y de mezquindad, pero es imposible que algo así ocurra».8 Al dar a sus padres cebada cocida mezquinándoles amrita, al ofrecerles licor de mala calidad y negarles buen vino, el Buda había cometido la peor falta a la devoción filial. Debería haber caído vivo en la gran ciudadela del infierno del sufrimiento incesante como lo hizo el rey Virudhaka, o haber contraído la lepra blanca, como el rey Ajatashatru. Sin embargo, cuarenta y dos años [después de haber logrado la iluminación], expuso el Sutra del loto diciendo: «Esos discípulos que concibieron la idea de la extinción e ingresaron en lo que consideraban el nirvana, en esa otra tierra buscarán la sabiduría del Buda y podrán escuchar este sutra».9 Shakyamuni expuso el Sutra del loto para saldar la deuda de gratitud contraída con sus padres; por tal razón, el buda Muchos Tesoros, que llegó del Mundo de la Pureza de los Tesoros, elogió su verdadera devoción filial. Y los budas de las diez direcciones se congregaron para declarar que, de todos los budas, él era quien mejor cumplía sus deberes como hijo.
Si vemos las cosas desde esta perspectiva, es evidente que la población del Japón no está respondiendo a sus deberes filiales. En un pasaje del Sutra del nirvana, el Buda enseñó que las personas desprovistas de amor filial serían tan numerosas como las partículas de polvo de la tierra.10 Esto explica que el sol, la luna y cada una de las ochenta y cuatro mil estrellas del cielo se hayan enfurecido y estén viendo con malos ojos a la tierra del Japón. A esto obedecen los frecuentes disturbios celestiales que los maestros adivinos mencionan al gobernante en sus informes. Con todos los sucesos extraños que ocurren en la tierra día tras día, el país es como un bote sacudido por el gran mar. Y por esta razón los niños del Japón han perdido la vitalidad, y las mujeres vomitan sangre.11
Usted es la persona de mejor proceder filial en todo el Japón. Brahma y Shakra descenderán del cielo como un par de alas para prestarle servicio, y las deidades terrenales de las cuatro direcciones darán apoyo a sus pies y lo venerarán como a su padre y su madre. Aún me queda mucho por decir, pero concluiré en este punto.
Con mi profundo respeto,
Nichiren
En el octavo día del tercer mes, tercer año de Koan (1280).
Respuesta enviada a Ueno
Antecedentes
Esta carta fue escrita en Minobu a Nanjo Tokimitsu, quien había pedido a Nichiren Daishonin que orara en el aniversario del fallecimiento de su padre, Nanjo Hyoe Shichiro. El padre de Tokimitsu había fallecido en 1265, el octavo día del tercer mes, es decir, en la misma fecha que fue escrita esta carta. En ella, el Daishonin explica el genuino significado de la devoción filial. En primer lugar, al citar ejemplos de las tradiciones china e india sobre la retribución p.1081que reciben las personas de mal proceder filial, alude al gran mérito que acumula el ser humano cuando actúa inspirado en un verdadero amor a los padres.
El Daishonin considera luego cuál es la enseñanza que permite a las personas cumplir sus deberes como hijos. Afirma que las doctrinas del confucianismo enseñan a cuidar a los padres mientras estos están vivos. Pero como tales doctrinas no esclarecen la verdadera naturaleza de la vida, tampoco indican cómo ayudar a los padres después de su muerte. Así pues, no enseñan el sentido más profundo de la devoción filial.
Además, ni siquiera las enseñanzas del Hinayana ni las del Mahayana provisional revelan por completo la verdad esencial. El Daishonin afirma que ellas no permiten que los padres fallecidos logren la Budeidad, y concluye afirmando que sólo mediante la fe en el Sutra del loto, que conduce a todas las personas por igual a la Budeidad, es posible hacer que los difuntos padres se iluminen. Esta es la forma de cumplir plenamente los deberes filiales.
Notas
1. Personaje de una leyenda china.
2. Otro legendario personaje chino.
3. En este caso, referencia a las escrituras del confucianismo y del taoísmo.
4. De acuerdo con el Sutra de la ceremonia por los ancestros fallecidos, Maudgalyayana percibió, con su visión divina, que su madre fallecida sufría en el estado de las entidades hambrientas. Trató de enviarle alimentos por medio de sus poderes trascendentales, pero estos se transformaron en llamas y la abrasaron. En consecuencia, buscó el consejo de Shakyamuni, quien lo instó a realizar ofrendas a los monjes en bien de su madre en el decimoquinto día del séptimo mes. Maudgalyayana ofrendó alimentos a la Orden budista, tal como le había aconsejado Shakyamuni, y la agonía de su madre se mitigó.
5. Referencia al mayor de los cuatro niveles que buscan alcanzar los practicantes que escuchan la voz, en el budismo Hinayana. En orden ascendente, son los niveles del que vence la corriente, el que regresa una vez, el que no regresa y el arhat.
6. La dama Maya fue esposa del rey Shuddhodana y madre de Shakyamuni. Se desconoce la fuente según la cual alcanzó el nivel del arhat cuando Shakyamuni tenía treinta y ocho años. Según el Sutra Maya, Shakyamuni utilizó sus poderes sobrenaturales para ascender a los cielos de las treinta y tres deidades, donde expuso sus enseñanzas a su madre, Maya, quien había renacido allí.
7. Esta afirmación refleja el punto de vista expuesto en las enseñanzas del Mahayana provisional, según el cual las personas de los dos vehículos jamás podrán lograr la Budeidad.
8. Sutra del loto, cap. 2. En este contexto, «vehículo inferior» se refiere a las enseñanzas provisionales.
9. Ib., cap. 7.
10. El Daishonin se refiere, probablemente, al pasaje del Sutra del nirvana que compara a quienes creen en la enseñanza correcta con las partículas de tierra que caben sobre una uña, y a los que practican enseñanzas distorsionadas, con las partículas de polvo de la tierra.
11. Probable referencia a las epidemias.